El FICVI reparte 10 premios a los mejores cortometrajes y cierra nueve días llenos de cine emergente

El Festival Internacional de Cortometrajes de Vila-seca ha anunciado esta noche el palmarés de su novena edición en una gala que ha repartido 10 premios y ha despedido nueve días de auténtica explosión cultural, llenos de cine emergente en formato corto, en el emblemático edificio novecentista del Celler de Vila-seca.

‘La Gran Obra’ de Alex Lora ha ganado el premio nacional al Mejor Cortometraje de ficción del Festival Internacional de Cortometrajes de Vila-seca (FICVI) por la originalidad del guion, cuidar todos los detalles, la realización minuciosa y su capacidad de apelar a los prejuicios del público.

Los otros grandes triunfadores de la noche, en la categoría nacional, han sido «Tesoro», que ha recibido el premio a la Mejor Animación para crear un cuento ingenioso y divertido que propone una idea muy bien explicada, y «Ei, Temi», que ha sido distinguido como Mejor Documental por abrazar con gran sensibilidad, humor y carisma una etapa de la vida.

A nivel internacional, el jurado de la sección oficial ha premiado el cortometraje de ficción francés ‘The mysterious adventures of Claude Conseil’, por la originalidad en la forma, el paisaje sonoro, por plantear desde otro lugar un problema de actualidad, y la mezcla entre la ornitología y el mundo del trap, y ha reconocido la animación polaca ‘There are people in the forest’ de Szymon Ruczynkiel por ir más allá y convertirse en una bofetada de realidad con una combinación perfecta entre sencillez, arte y crudeza.

El premio Do Catalonia ha ido a parar a “Els buits” de Sofia Esteve, Isa Luengo y Marina Freixa, por su uso hábil del lenguaje audiovisual para reconstruir unos hechos y que no caigan en el olvido. El documental, que ya ha recibido varios premios y nominaciones, es un ejercicio de memoria histórica en el cual Mariona Roca reflexiona con su hija y cineasta, Marina Freixa, sobre su paso por un correccional franquista, y recompone un relato distorsionado sobre la represión.

El premio Do Catalonia ha ido a parar a “Els Buits” de Sofia Esteve, Isa Luengo y Marina Freixa, por su uso hábil del lenguaje audiovisual para reconstruir unos hechos y que no caigan en el olvido. El documental, que ya ha recibido varios premios y nominaciones, es un ejercicio de memoria histórica en el cual Mariona Roca reflexiona con su hija y cineasta, Marina Freixa, sobre su paso por un correccional franquista, y recompone un relato distorsionado sobre la represión.

También hay reconocimientos para los que se han atrevido con el reto del concurso IN SITU de rodar cortometrajes de un máximo de 3 minutos sobre alguna persona o grupo de personas del municipio. En esta categoría, el primer premio ha sido para «Retrato de un Vampiro» de Arian Araujo y el segundo para «Ezequiel» de Nil corral.

El Jurado Joven se ha decidido por «El armario Viviente», de Martí Madaula Ardilla, y el deseado premio del público, que ha votado al finalizar cada una de las sesiones, se lo ha llevado el cortometraje «Dol i fa sol», de Maria Besora y Pep Garrido.

La gala de clausura de la novena edición del FICVI ha puesto el punto final a una intensa programación con más 50 cortometrajes proyectados; una decena de coloquios; más de 40 personas invitadas nacionales e internacionales como cineastas, programadoras y artistas; más de 2.500 personas de público; maridajes de vinos; creación de cine en el municipio, un espacio de networking y talleres familiares que han hecho de Vila-seca un punto de encuentro para profesionales del sector y público cinéfilo de todas las edades.

El acto, conducido por la periodista Samanta Villar, ha sido presidido por el alcalde de Vila-seca, Pere Segura, y ha contado con la participación de la presidenta de la Diputación de Tarragona, Noemí Llauradó, y la presidenta del Patronato Municipal de Turismo, Lluïsa Clavé.

La directora artística, Alba Bresolí, ha aprovechado su intervención para hacer un balance muy positivo de estos nueve días de vivencias emocionantes e inolvidables y ha explicado que el festival «no es solo un acontecimiento cinematográfico, sino una plataforma de conexión entre realidades y personas diversas». En este sentido, la directora ha afirmado que el FICVI «es una ventana para descubrir nuevo cine emergente que se acerca a nuestra realidad pero también para descubrir otras muy distintas de la nuestra».

Por su parte, la presentadora, Samanta Villar, ha querido poner en valor el formato de los cortometrajes y destacar el privilegio de tener un festival como este en el territorio. «A menudo se habla de los cortometrajes como si fueran hermanos pequeños de las películas, pero los que nos dedicamos al audiovisual sabemos que menos es más y que entre los cortometrajes hay joyas que tienen el poder de hacernos vivir un millón de vidas en pocos minutos», ha afirmado la periodista.

Finalmente, el alcalde de Vila-seca, Pere Segura, ha cerrado el acto con unas palabras de la cineasta italiana Alice Rohrwacher, que entiende el cine como una gran plaza donde todo el mundo tiene cabida, para vivirlo como un espacio de encuentro y celebración. Desde este punto de vista, el alcalde ha explicado que la idea tiene mucho que ver con los propósitos que se plantearon desde los inicios del festival y ha constatado que el certamen ya ha llegado a una plena consolidación.

Pere Segura también ha afirmado que «durante estos días de otoño el Celler se convierte en un lugar acogedor donde nos encontramos para celebrar que nuevas y viejas ideas, nuevas y viejas pasiones, nuevos y viejos sentimientos se dan cita para llenar nuestras mentes y nuestros corazones de grandes historias expresadas con el ya viejo arte del cine y en este caso del cortometraje». Para acabar, el alcalde ha agradecido el trabajo y dedicación de los diferentes jurados -el oficial, el joven y especialmente el del público que hace posible el festival- y ha avanzado que a partir de este momento el Patronato de Turismo y Parallel 40 ya empiezan a trabajar en la décima edición del festival.

Hay que recordar que mañana domingo, 17 de noviembre, se podrán ver los 11 cortometrajes ganadores de la novena edición del Festival Internacional de Vila-seca en la sesión final que se llevará a cabo las 19 horas en el Celler de Vila-seca. Cómo en todas las proyecciones anteriores, el acceso será libre y la entrada gratuita.